Crisópidos

Aproximadamente de 12 a 20 mm de longitud. Los adultos son verde pálido y tienen largas antenas y ojos brillantes y dorados. Tienen grandes alas, que son transparentes y verde pálido y un cuerpo delicado. Los huevos ovalados se ponen al final de pedúnculos largos y sedosos. 

Toda población de insectos en la naturaleza es atacada en alguna medida por uno o más enemigos naturales, y estos enemigos naturales de forma natural se han encontrado en el campo, pero cada vez es más frecuente, como consecuencia del uso abusivo e indiscriminado de insecticidas  de amplio espectro, encontrarlos en nuestros en poblaciones insuficientes como para ser capaces de controlar cualquier plaga. Es por esto por lo que desde hace tiempo se han puesto en práctica las sueltas ocasionales o repetidas de enemigos naturales criados en laboratorio, cuya única misión es la de aumentar sus poblaciones lo suficiente como para controlar las plagas.

Estos huevos comienzan de color verde y cambia a gris en unos días. Las larvas activas son gris o tirando a marrón. Son parecidos a los lagartos con patas bien desarrolladas y tenazas con las que chupar los líquidos corporales de sus insectos víctimas como los pulgones.

El uso de enemigos naturales para reducir los impactos de las plagas, tiene una historia muy larga; los primeros en utilizar esta técnica fueron los antiguos chinos.

 

El Control Biológico consiste en el uso de organismos benéficos (enemigos naturales) contra aquellos que causan daños (plagas).

 

Este Control Biológico no busca la erradicación de las plagas sino la reducción de su población hasta niveles que no produzcan daños económicos, garantizándose de esta manera la supervivencia del agente controlador ya que siempre encontrará individuos plaga de los que alimentarse pudiendo mantener de esta forma su presencia en el nicho en cuestión.

 

La familia Chrysopidae representa sin duda uno de los más útiles aliados del hombre en su lucha contra determinadas plagas de fitófagos, especialmente áfidos, cóccidos y aleyródidos, ya que la mayoría de las más de 2000 especies que constituyen esta familia predan activamente sobre estos insectos, tanto en estado larvario como en estado adulto. 

 

 

Morfología

Los huevos son pedunculados, es decir, se encuentran en el extremo de un largo pedicelo, formado por una secreción del abdomen, que solidifica rápidamente en contacto con el aire y que es fijado a las hojas por su parte inferior.

Al principio son de color amarillo-verdoso, pero conforme maduran van adquiriendo una tonalidad grisácea. Se pueden encontrar aislados o en pequeños grupos, fijados sobre la superficie de los vegetales.

 

 

 

 

 

(huevo maduro y pupa de crisopa)

 

Las larvas son campoideformes (poseen el cuerpo deprimido) con 2 piezas mandibulares muy visibles, finas y curvadas, y desarrolladas patas.   

Poseen pelos en el dorso del cuerpo. Su cabeza es de color claro, con dos rayas oscuras divergentes, y en el dorso se observan un par de bandas oscuras longitudinales, junto a diversas rayas transversales paralelas. El tercer estadío larvario mide aproximadamente 8 mm. 

 

La pupa presenta un aspecto sedoso de color blanquecino, de 3-4 mm de diámetro.

 

Los adultos de C.carnea son de color verde pálido, con el abdomen largo y estrecho y ojos relativamente grandes de color dorado y brillantes, sus antenas son filiformes y largas, y poseen dos pares de alas membranosas largas, de color verde transparente y nerviación abundante, de aspecto reticulado.

 

 

 

 

Ciclo de vida de Chrysoperla carnea

Los crisópidos (Chrysopidae) son una familia de insectos del orden Neuróptera.

Presenta una gran adaptabilidad a condiciones ambientales adversas y amplias fluctuaciones térmicas. Su actividad depredadora se mantiene con rango de temperaturas entre 12 y 35ºC.

Esta familia es cosmopolita, sus miembros habitan especialmente en zonas de gran vegetación y agrícolas, los adultos se pueden encontrar en una gran diversidad de cultivos, como maíz, hortalizas y cítricos, en busca de alimento.

El crisópido C.carnea pasa el invierno en forma de pupa, usualmente en la hojarasca presente en las proximidades de los cultivos. Durante la primavera y el verano aparecen los adultos. Estos poseen una elevada capacidad de dispersión, facilitando la localización de sus presas en cuya proximidad realizan la puesta.

Durante su vida, las hembras ovipositan más de 200 huevos (aproximadamente 20 huevos por día) en la parte inferior de las hojas, generalmente próximos al hábitat de la presa. Los huevos, de forma ovalada, son depositados individualmente en un fino hilo de seda. Son de coloración verde clara, tornándose a tonos grises conforme se aproxima su eclosión, una vez eclosionados son de color blanco.

Las larvas de crisopas emergen entre 3 a 6 días, y son exclusivamente predadoras y muy activas. En pleno desarrollo tienen una longitud de alrededor de 10 m

 

 

Ciclo biológico de los crisópidos


El estado larval posee tres estadios y dura cerca de tres semanas. Al final del tercer estadio larval, la larva teje una cápsula redonda y se transforma en pupa en la planta en donde se encuentre.

La emergencia del adulto ocurre aproximadamente después de una semana; por lo tanto, el ciclo de vida del insecto alcanza de 3 a 4 semanas en verano. Cuando las temperaturas son más bajas, el ciclo se puede alargar de 4 a 6 semanas.

En condiciones naturales puede completar hasta 3 generaciones anuales.

Paul De Bach indica que el 99.9% de las plagas potenciales están bajo un control biológico natural. El control biológico natural o inducido es una de las tácticas del manejo integrado de plagas. Actualmente, la cría masiva de parasitoides y depredadores y su liberación en campo representa un método de control de plagas, exitoso económico y no contaminante. La familia Chrysopidae está integrada por especies comúnmente llamadas “leones de áfidos”, o simplemente “chrysopas” y son los más importantes de todos los depredadores del orden Neuroptera. Entre ellos las especies Chrysoperla carnea, C. asoralis, y C. externa son criadas masivamente durante  muchos años en Perú, Colombia, Norteamérica, Europa y México y las crisopas han sido utilizadas para el control de plagas en hortalizas y frutales tanto en campo abierto como en invernadero con mucho éxito. Actualmente se les consideran como los agentes biológicos decisivos en el control de plagas agrícolas.20

Las condiciones climáticas del Perú, especialmente la costa (donde hay ausencia de lluvias y temperaturas favorables para las crisopas durante todo el año), hacen que este depredador tenga especial éxito, comparado con el que se logra en otras partes del mundo. Estas notas se prepararon con la finalidad de describir el comportamiento de las crisopas para que los técnicos y agricultores puedan entender mejor su funcionamiento y aplicación Comportamiento de Chrysoperla carnea En su estado adulto, los Chrysoperla, se alimentan de la mielecilla que producen algunos insectos y néctar o polen de las plantas, lo que los hace sobrevivir fácilmente en el habitat, en comparación con otros insectos benéficos. Las hembras generalmente depositan sus huevecillos en forma individual y preferentemente en lugares donde se encuentran insectos como los pulgones, que producen mielecilla que significa una fuente alimenticia para el adulto y que además facilita a las larvas recién emergidas encontrar rápidamente a sus presas. La longevidad del adulto puede ser de varios meses.

El tiempo de desarrollo de huevo a adulto es de 22 días bajo condiciones de 27 ºC y humedad relativa entre 50 % y 80 %. 21Durante su desarrollo larval pasa por tres instares en un periodo de 10 días, durante los cuales manifiesta su actividad de depredación. Los huevos al ser ovipositados son de color verde y antes de la eclosión adquieren un color gris o plomo, están provistos de un pedicelos cuya función es protegerlo de canibalismo, depredación o parasitismo. La larva se caracteriza por una alta capacidad de búsqueda, intensa actividad, movimientos rápidos y por ser muy agresiva. Prefiere insectos de cuerpo blando tales como pulgones, moscas blancas, trips, piojos harinosos, huevecillos y larvas de lepidópteros y ácaros. Se ha observado que pueden alimentarse de minadores perforando la cutícula de la hoja con sus mandíbulas. Comúnmente todas las especies de Chrysoperla son consideradas depredadores generalistas, sin embargo, muestran sus preferencias por determinadas presas.

Recién emergidas del huevecillo, las larvas pueden diseminarse hasta 25 m en busca de alimento. Algunas larvas pueden recorrer 4 a 5 km, aunque algunos autores indican 11 a 13 Km., antes de convertirse en pupa. Solamente las Chrysopas en estado de larvas son las que realizan el control de plagas y las larvas de tercer instar son las que hacen la mayor parte de la actividad de control biológico. Ejemplo: Mientras que la larva de tercer instar consume 191 huevecillos o 124 larvas de primer instar del gusano del fruto en un lapso de 48 h, la larva de primer instar sólo consume 10 huevecillos o nueve larvas de primer instar durante el mismo periodo de tiempo. Una larva, durante todo su desarrollo larval, puede consumir un total aproximado de 300 pulgones pero el 80% es consumido por la larva del tercer instar. En el caso de huevecillos de Sitotroga cerealella, puede consumir 8000 de ellos, así mismo, puede alimentarse en cada caso, de 250 ninfas de chicharrita de la vid, 370 huevecillos del barrenador europeo del maíz, 510 pupas de mosquita blanca, 640 huevecillos o 2050 larvas recién nacidas de gusano cortador, 3780 querezas de la familia Coccidae, 6500 huevecillos de la qureza del pino, 11,200 arañas rojas. La efectividad de las larvas Chrysoperla se reduce bajo el efecto de factores como lluvias torrenciales, vientos fuertes, temperaturas por debajo de 12 ºC o mayores a 32 ºC (los huevecillos expuestos al sol mueren cuando se alcanzan 37ºC), depredadores y parásitos.

Las plantas con hojas pegajosas o vellosas dificultan el encuentro de presas ya que las Chrysoperlas

22

las detectan por contacto directo. La efectividad de las larvas de Chrysoperla depende de su preferencia por cierto tipo de presas. En cultivos hortícolas, los pulgones son mas preferidos, después los trips y al final los ácaros. Se ha observado también que la larva de Chrysoperla prefiere los huevecillos en lugar de larvas; así mismo, prefiere pulgones en lugar de huevecillos o larvas; por lo tanto, cuando están presentes los pulgones, la depredación sobre huevecillos y larvas de gusano del fruto puede disminuir hasta en un 50%. 
Cuando se quiere controlar araña roja pero están presentes trips o pulgón negro, el control de araña roja será reducido. Las larvas de Chrysoperla prefieren presas más pequeñas que ellas. Son activas a temperaturas de 12 a 35 °C y La temperatura óptima para su mayor actividad es de 19 a 30 °C. Una larva de Chrysoperla de primer instar puede consumir 9 larvas de primer instar de gusano del fruto pero no consumirá ninguna larva de tercer instar. Los adultos recién formados, se dispersan varios km en la dirección del viento durante las primeras dos o tres noches y también pueden migrar hacia sitios que tenga mayor cantidad de polen y néctar. Liberaciones de Ch. carnea Los estados de desarrollo de Chrysoperla carnea, utilizados para su liberación en campo son el huevecillo y las larvas de primero y segundo instar. Los mejores resultados se han obtenido al liberar larvas, dada su mayor capacidad para soportar las condiciones ambientales adversas y defenderse de otros organismos depredadores, sin embargo. Los huevecillos aunque están más expuestos a factores de mortalidad que las larvas, representan la mejor opción de liberación por su fácil manejo. Durante las primeras dos semanas después de que se liberan los huevecillos de Chrysoperla y se desarrollan el primer y segundo instar larvales, se tiene un efecto reducido sobre la plaga la cual puede llegar a incrementar su población a niveles fuera de control. Con el fin de tener mayor probabilidad de éxito en el control de la plaga y menor riesgo de daño, los insectos benéficos deben ser liberados cuando la población de insectos plaga es baja.24

Para tener una población constante de larvas de Chrysoperla de tercer instar en el campo durante el periodo crítico de infestación de una plaga, será necesario realizar liberaciones semanales, iniciándolas cuando la población plaga aun es baja. Liberaciones de 200 huevecillos y larvas de C. carmea por árbol, han logrado reducir altas poblaciones de Prays oleae plaga del olivo.La eficacia del método y cantidad de individuos por liberación está estrechamente relacionada con el tipo y densidad de la población plaga, tipo y desarrollo fenológico del cultivo y la relación depredador-presa. La relación depredador-presa ha sido usada para predecir la eficacia de algunos Chrysopidae contra plagas de la papa y hortalizas. Así, la relación 1:5 usado en el caso del pulgón verde,  redujo la población plaga en un 72%, sin embargo, para obtener un alto nivel de efectividad contra otros pulgones ha sido necesario incrementar la relación a 1.5:1.

Se ha observado que algunas especies de Chrysoperla han eliminado hasta el 98% de la población de áfidos cuando se liberan larvas en una proporción de 1 por cada 5-30 presas. Cuando se han liberado huevecillos de Chrysoperla en una proporción de 1 huevecillo por cada larva de la catarinita de la papa se ha obtenido un 74% de control. Inicialmente, cuando se realizan las liberaciones de Trichogramma, no es recomendable liberar Chrysoperla al mismo tiempo ya que puede depredar huevecillos parasitados por Trichogramma y como consecuencia, el establecimiento de la avispita en el cultivo será nulo. Chrysoperla debe ser liberada como complemento a Trichogramma cuando se observen las primeras larvitas de la plaga y se estime que el parasitismo por Trichogramma esta dejando una población de larvas por encima del nivel de daño que soporta el cultivo. Es conveniente también liberar Chrysoperla antes de establecido el cultivo, ya sea en las franjas rompe viento o parcelas especiales para reservorio de insectos benéficos. 50% son hembras, aunque la actividad de depredación es hecha por larvas de ambos sexos. Dependiendo del número y tipo de presas en el campo se decidirá la cantidad a liberar. Su diversidad alimenticia dificulta establecer la dosis de liberación en campo.

25

 

Es conveniente hacer un muestreo previo de presas en el campo, estimar el promedio/planta o por metro lineal de cultivo y multiplicar por el número total de plantas para calcular el total de presas/ha. En siembras escalonadas es posible lograr un establecimiento de Chrysoperla porque al mismo tiempo va migrando hacia las plantas jóvenes en busca de alimento. Métodos de liberación Considerando las características biológicas de estos depredadores, se pueden realizar dos tipos de liberaciones: las inoculativas de adultos y las inundativas de larvitas en una relación depredador-presa mayor a 2.0 y menor a 5.0 Liberación de larvas. Se recomienda distribuir el material por todos los sitios donde se encuentre ubicada la plaga.

 

26

Aspecto de las ninfas de los pulgones una vez devorados por las crisopas

 

Dado que la infestación en algunos cultivos es homogénea, la aplicación también debe hacerse de la misma manera, esparciendo la cascarilla de arroz sobre el cultivo. Es muy importante leer bien la etiqueta antes de usar el producto y seguir las indicaciones al pie de la letra. Liberación de adultos. Se recomienda liberar adultos alimentados en una dosis de 200 a 500 por Ha. Esta liberación no es muy efectiva cuando se requiere de un control inmediato.

27

En inoculaciones iniciales es recomendable. Época y frecuencia de liberación Es recomendable iniciar las liberaciones de Chrysoperla, inmediatamente cuando se notan las primeras colonias de pulgones alados, los primeros huevos, los primeros trips, ácaros etc. Se debe estimar que las larvas realizarán su actividad de depredación durante 10 días. Durante este lapso de tiempo y en base a muestreos, se decidirá hacer una segunda liberación. Comúnmente Chrysoperla logra establecerse en el cultivo y alcanza su estado adulto para ovipositar la siguiente generación. Un muestreo posterior semanal, deberá indicarnos la presencia de menor número de presas, si Chrysoperla esta trabajando. De acuerdo a muestreos y al establecimiento del Chrysoperla se decide si se continúa liberando. En condiciones de costa, las poblaciones naturales llegan a suplir la segunda liberación Evaluación de la efectividad Desde la detección inicial de la población plaga, ya sean huevecillos, larvas, ninfas u otras presas, se llevará un registro de ellos cada tres días o semanalmente, según se considere necesario. Se hará lo mismo con Chrysopa después de iniciar sus liberaciones.

Cuando la densidad de población de huevecillos, larvas o ninfas sea baja o escasos de encontrar, significa que Chrysopa está realizando su trabajo. Las decisiones futuras, es decir, continuar liberando o no, dependerá de si la población plaga se está incrementando, permanece estable o va disminuyendo. Susceptibilidad a insecticidas Las larvas de Chrysoperla son resistentes a dosis bajas de algunos insecticidas pero son muy susceptibles a otros. Los adultos tienden a ser más susceptibles que las larvas. Los insecticidas permetrina, oxamyl, lanate, fenvalerato, lambda cialotrina, dimetoato, cypermetrina, deltametrina, clorpirifos, metamidofos, propoxur, azinfosmetil, imidacloprid, acefato,oxidemeton metil, naled, monocrotofos, malation, diazinon, carbaril, abamectina, endosulfan y rotenona han llegado a reducir en más del 75% a la población de lavas y adultos de Chrysopas. y algunos de ellos pueden persistir hasta 12 días después de aplicados en el campo. En caso de requerir una aplicación para controlar el remanente de larvas, pulgones, trips o moscas blancas, si aún quedan después de las liberaciones, pueden usarse los productos como Bacillus o aquellos que sean inocuos para Chysoperla.

Plagas sobre las que actúa

Las especies pertenecientes a la familia Chrysopidae pertenecen al grupo de depredadores generales (o poco específicos), considerándose polífagos por su variada alimentación; han sido estudiadas como controladores de áfidos y lepidópteros a nivel mundial con óptimos resultados.

Los tres estadíos larvarios de C.carnea son muy ágiles en sus desplazamientos y voraces depredadores considerándose como los depredadores generalistas más importantes de pulgones (Aphididae spp.),si bien, se ha comprobado que en ausencia de áfidos el crisópido C.carnea es capaz de sobrevivir, pudiéndose alimentar de ácaros, trips, gusanos, mosca blanca e incluso pequeños lepidópteros. La larva de tercer estadío depreda el 80% del total de presas que ingesta a lo largo de todo su ciclo biológico. La larva clava sus mandíbulas en el cuerpo de la presa y succiona su contenido fluido.

Los estudios a los que se ha sometido C.carnea, demostraron que aunque C.carnea se alimenta tanto de Myzus persicae como de Aphis gossyppi, a esta última especie es incapaz de controlarla en cultivo de pepino, mientras que en otros cultivos el control que realiza sobre ambas especies de áfidos está muy influenciado por condiciones ambientales, población de las presas, cultivo y nivel de parasitismo hacia el depredador.

 

Distribución geográfica

La capacidad de adaptabilidad a condiciones ambientales adversas y amplias fluctuaciones térmicas, así como su amplio abanico de presas ha hecho de los crisópidos una de las familias de insectos más grandes de los neurópteros con cerca de 2000 especies descritas y con una amplísima distribución geográfica, a esta familia se la considera cosmopolita.

C.carnea ha sido encontrada en cultivos de invernadero y al aire libre en el sur de la península.

Los estudios en campo reflejan en nuestras latitudes el siguiente reparto de especies de Chrysoperla Estudio taxonómico de los crisópidos (2005). Prof. Andras Bozsik (Universidad de Debrecen, Hungría)

Larvas de Chrysoperla carnea para el control de numerosas plagas agrícolas y ornamentales, tales como pulgones (Aphididae spp.), gusanos (Heliothis spp.), mosca blanca (Bemisia spp.), Prays oleae

Modo de empleo

La suelta se debe realizar inmediatamente después de la recepción del producto, si no fuese así, se puede almacenar durante 1-2 días en un sitio fresco, sin olor a pesticidas, con una Tª entre 8 y 10ºC.

Verter el contenido del frasco en las cajitas que lo acompañan, llenándolas hasta la mitad de su capacidad para, posteriormente, colgarlas en las plantas lo más próximas posible al lugar donde se ha detectado el foco de la plaga.

Hacer esta maniobra preferiblemente en las horas más frescas del día, al amanecer o bien a la caída de la tarde.

Dosis de aplicación

Es recomendable hacer las primeras sueltas en el momento en que se localicen individuos plaga en nuestro cultivo u ornamental. La aplicación dependerá de cual sea el grado de infestación de nuestro cultivo:

- GRADO DE INFESTACIÓN BAJO (hasta 15 indvs plaga/brote)

Siempre colocaremos las cajitas lo más cerca posible de los focos donde se encuentre la plaga a controlar, se deben llenar hasta la mitad. En este caso se pondrán 2 cajitas por árbol.

 

- GRADO DE INFESTACIÓN MEDIO (hasta 100 indvs plaga/brote)

Siempre colocaremos las cajitas lo más cerca posible de los focos donde se encuentre la plaga a controlar, se deben llenar hasta la mitad. En este caso se pondrán 4 cajitas por  árbol; es recomendable valorar el progreso de la plaga a la semana para repetir la suelta en caso de que el número de larvas de Chrysoperla carnea soltadas haya sido insuficiente y el insecto plaga mantenga su población.

 

- GRADO DE INFESTACIÓN ALTO (más de 100 indvs plaga/brote)

Siempre colocaremos las cajitas lo más cerca posible de los focos donde se encuentre la plaga a controlar, se deben llenar hasta la mitad. En este caso se pondrán 6 cajitas por árbol para repetir la suelta de larvas de Chrysoperla carnea a la semana; a partir de este momento conviene valorar el progreso de la plaga.

 

Diagrama que se adjunta:

 

Tratamiento adecuado

 

 

GRADO DE INFESTACIÓN BAJO

(hasta 15 indvs plaga/brote)

Siempre colocaremos las cajitas  lo mas cerca posible de los focos donde se encuentre la plaga a controlar  , se deben llenar hasta la mitad.

En este caso se pondrán 2 cajitas por árbol

GRADO DE INFESTACIÓN MEDIO

(de 15 a 100 indvs plaga/brote)

Siempre colocaremos las cajitas  lo mas cerca posible de los focos donde se encuentre la plaga a controlar  , se deben llenar hasta la mitad.En este caso se pondrán 4 cajitas por árbol; es recomendable valorar el progreso de la plaga a la semana para repetir la suelta en caso de que el número de crisopas soltadas haya sido insuficiente y el insecto plaga mantenga su población.

GRADO DE INFESTACIÓN ALTO

(más de 100 indvs plaga/brote)

Siempre colocaremos las cajitas  lo mas cerca posible de los focos donde se encuentre la plaga a controlar  , se deben llenar hasta la mitad.

En este caso se pondrán 6 cajitas por árbol para repetir la suelta a la semana; a partir de este momento conviene valorar el progreso de la plaga.

 

                           

 

Material

Las larvas de Chrysoperla carnea se liberan en el campo vertiendo el sustrato inerte con las larvas sobre las cajitas que a su vez deben colgarse lo más cerca posible   del foco donde se ha localizado la plaga. 

 
 

Control de calidad en la producción

El control de calidad lo hace se hace en colaboración con el departamento de Biología Animal, vegetal y Ecología, área de Zoología de la Universidad de Jaén, a través del profesor Entomólogo D. Ramón González Ruiz